miércoles, 15 de octubre de 2014

Destino Sidney

Después de muuuuuchos años en la Argentina, intercalados con algunas misiones cortas, otras medianas y otras largas, un día me tocaba salir destinado al exterior. Y el día finalmente llegó. Así, después de mucho cavilar, especular, rosquear y resignar, desde el 4 de septiembre estoy destinado en Sidney, Estado de Nueva Gales del Sur, en Australia, sede de uno de nuestros 62 Consulados.

Funcionalmente, dependemos de la Embajada Argentina en Canberra (Canberra es como la Brasilia de Australia). Es la Capital, así que allá se hace el trabajo más glamuroso: las relaciones políticas, económicas, culturales, sociales. Los temas importantes. A diferencia de la mayoría de nuestras Embajadas en el resto del mundo, Canberra no tiene una sección consular. Y como no hay otro consulado en el país que no sea este, en Sidney nos toca atender a los aproximadamente 35.000 argentinos desparramados en los 7,7 millones de km2 de este país-continente – lo que representa un territorio ligeramente menor al de Brasil.

Si el laburo glamuroso acá no llega, ¿Qué es exactamente lo que nos toca hacer? La verdad, bastante. Tramitar pasaportes, DNIs, certificados de antecedentes penales, emitir certificados de supervivencia, de residencia. Hacemos poderes, emitimos visas, legalizamos firmas. Otorgamos opciones de nacionalidad a hij@s de argentin@s nacid@s en Australia – lo que está muy copado, los bebés entran en el consulado siendo apátridas o con nacionalidad australiana, los identificamos, y un par de horas de trámites después salen argentin@s, con número de DNI 52 millones y todo!!!!! Atendemos a argentin@s en problemas, y a veces nos toca visitar cárceles u hospitales – en algunos casos incluso jugamos al psicólogo. Para muchos de esos trámites, y para tratar de facilitarles la vida a nuestros compatriotas, nos toca actuar de intermediarios con la ANSES, el ReNaPer, la policía australiana, migraciones de ambos países y un sinnúmero de siglas que yo ni sabía que existían… De todo un poco, realmente. Sólo entre esas cuestiones y mantener la máquina funcionando y el Consulado abierto, los días se me pasan volando.

Todo esto para mí es un gran desafío. Es la primera vez que me toca hacer laburo consular en gran escala. Y la verdad es que hay pocas escalas mayores que 35.000 argentinos distribuidos en 7,7 millones de km2. Igual no me puedo quejar. Bah, no me quejo. En lo personal, hay lugares peores para vivir que Sidney – aunque no conozco ningún lugar más caro que este. En lo profesional, el Consulado funciona bien. Funciona muy bien. El equipo es bueno, con la Embajada nos llevamos de diez, el laburo está sistematizado y la comunidad argentina en un 85% (más o menos) está satisfecha y es encantadora.

Igual por suerte hay detalles para mejorar, así no me transformo en un simple agente del status quo. La central telefónica, por ejemplo. Necesitamos cambiarla, urgente. Tiene como 20 años, y cobró vida propia, tomando decisiones arbitrarias sobre el destino y el eventual almacenamiento (o no) de cada uno de los llamados y de cada uno de los mensajes. Nos putean un poco por este tema… el otro gran problema es que no tengo los equipos necesarios para tramitar pasaportes fuera de Sidney, entonces la comunidad que vive por ejemplo en Perth (4.000 km de distancia, ponéle) tiene que viajar 5 horas en avión para documentarse. Son mis desafíos para los próximos meses, creo que si los soluciono subo del 85% de satisfacción a un 95. Y me voy a la playa tranquilo...

5 comentarios:

Comandante Cansado dijo...

Si sabe de poetas radicados ahí, avise. Un abrazo.

El Marpla dijo...

Aguanten los Consulados Generales de paises grandes en la zona Asia Pacifico ;)

Todos tenemos desafios y siempre son divertidos. Nosotros estamos con cientos de chinos queriendo visar, y un par de miles de niñitos argenchinos viviendo en la jurisdiccion y con sus padres en Argentina. Da para muchas historias.

el de adentro dijo...

Comandante, todavía no tengo muy en claro lo de los poetas, mantendré las antenas paradas y Ud. será el primero en ser avisado!!

Marpla, jua jua jua, aguante!!!! Lo de los argenchinos es fascinante, las historias de vida de esa gente dan para varios volúmenes de varios libros. Acepto contribuciones externas!!!!!!

Anónimo dijo...

Querido Eldeadentro, qué alegría que sigas con tus crónicas!!! para los que nos interesa la diplomacia y la política internacional, sobre todo la cotidiana y de barrio, tus relatos son indispensables. Te mando un abrazo grande.
Santiago

el de adentro dijo...

Gracias Santiago!!!!!!!!!!!!