Era una cuestión de tiempo hasta encontrar cables nuestros en internet (más allá de los que eventualmente se filtran en la prensa). De mi parte, siempre resistí a la tentación. Una vez me quise poner a investigar sobre la posibilidad legal de publicar un cable (siempre que fuera de naturaleza pública) en internet, pero me dio fiaca. Y el otro día, webbeando, encontré a otro diplomático bloguero. Se llama Juan Carlos Saint Lary, egresado de la 1ª (!) promoción del ISEN, jubilado.
Su bloj se llama Diplomacia y Política, y en términos generales el señor este se la pasa despotricando: contra Taiana y el gobierno en general, contra los ex-SECEN (diplomáticos comerciales), contra La Campora, contra los Embajadores de menos de 50 años, contra Timerman, y contra casi todo el establishment de la Cancillería: García Moritan, Ruiz Cerutti y Basabe, Luis Kreckler, Faurie, Taccetti y Piñeiro Iñiguez, etc etc.
Justamente al nuevo director del ISEN le dedica sus más feroces diatribas, en una serie de posts donde revela una guerrita de cables medio berreta del año 2003 entre el bloguer, en ese entonces cónsul general en Santa Cruz de la Sierra, y Piñeiro Iñíguez, recién nombrado Embajador argentino en Bolivia.
El primero de los posts, titulado El límite de lo tolerable, reproduce un cable reservado del mismo Saint Lery de 31 de agosto de 2003, donde despotrica contra media Cancillería, dedicando los párrafos más sulfurados a Piñeiro Iñíguez. Parece que la discordia empezó cuando Piñeiro Iñíguez arribó a la Embajada en Bolivia el 4 de mayo e informó a la Dirección de Personal, dándole copia del cable a los consulados en Bolivia (incluyendo Sta. Cruz). Mi colega blogger se ofendió por no haber recibido un cable personalizado del nuevo embajador.
Pero la cosa se puso fea cuando Piñeiro, el 20 de mayo, tuvo el tupé de solicitarle a Saint Lery (por entonces su subordinado) un informe sobre las actividades del Consulado General, y pedirle colaboración con motivo de la próxima celebración, en Santa Cruz de la Sierra, de la Cumbre Iberoamericana. El 23 de mayo, Saint Lery le contesta a su jefe que "El Consulado viene haciendo lo mismo que en años anteriores", y respecto al pedido de colaboración, le pide que sea más específico.
El próximo cable de Piñeiro Iñíguez es un poco subido de tono (poquito, tampoco mucho), y le exige una respuesta a lo solicitado a efectos de coordinar las actividades en Bolivia. Ahí Sant Lery descarga toda su furia y, en tres cables (reproducidos sólo parcialmente) se muestra ofendido por el mal trato del nuevo Embajador, despechado por no haber sido saludado como correspondía, y pone a trabajar a todo el Consulado para que detallen por cable hasta los rollos de papel higiénico del baño. Todo muy constructivo e interesante.
PUEDE FALLAR
Hace 13 horas
2 comentarios:
Super hallazgo el blog colega!!!
No me sale el nombre de la odóntologa, tiene el consultorio a walking distance de LA CASA.
Ernestina
Es un hallazgo, ¿no? Medio pelmazo, principalmente cuando se pone a publicar cartas de jubilados o casi-jubilados, pero igual adictivo... el consultorio de Karina estaba en Córdoba y Talcahuano, pero ahora se mudó a Riobamba y Sarmiento...
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