jueves, 7 de octubre de 2010

Das milagren

Salió todo bien en Alemania. Por lo menos la parte que me tocó organizar. Los empresarios todos contentos, las agendas terminaron bien (no mucha cantidad, pero buena calidad), organizativamente salió impecable y nos felicitaron un montón.


Cuando me cagó a pedos mi jefe porque la proyección del desayuno de trabajo no decía "Desayuno de Trabajo sobre Negocios, Comercio e Inversiones entre Alemania y Argentina", sino que aparecía la pantalla de windows, me calenté y lo mandé a la puta que los parió. Digo, si nadie se queja y los empresarios están contentos, ¿por qué tengo que aguantarme todas las cagadas a pedos? Y por boludeces....


Quizá sea una modalidad que impera en la Cancillería, la cagada a pedos preventiva. Antes que te mandes un moco, te cagan a pedos, por las dudas. Porque los jefes saben que el moco, más temprano o más tarde, llega.


Ni me enteré de la reunión entre la PNA y Merkel. Pero leyendo los diarios, queda claro que la alemana no aflojó.


Hoy estamos en Hannover, en un evento que en realidad es una chantada, organizado por la Asociación Latinoamericana. En un rato, la PNA sale para ir a la cena de gala de la misma Asociación. Espero que no sea la misma chantada a la que mandaron a los empresarios argentinos.

A los que le interese, la TV pública va a televisar en vivo el discurso de la PNA, que se hace en los restos de un castillo del siglo XVII. El lugar es espectacular. La PNA hablará a eso de las 22:00, por lo que en la Argentina será a eso de las 5 de la tarde, más o menos. Si ven un pelotudo con cara de nabo corriendo de un lado al otro, ese soy yo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Jijiji, no había ninguno con cara de nabo en la transmisión del discurso de CFK. Es más, sólo la vi a ella. Dicen que fue transmitido desde Burzaco. Saludos, descansá que te viene bien, M.

el de adentro dijo...

Al final no necesité correr, sino que me senté a morfar tranquilo en una mesa no muy lejos de la PNA. El discurso estuvo bueno, el morfi maso. Igual circulé un rato, salí un par de veces a fumar un cigarrillo. Para pasar al baño tenías que pasar por las espaldas de Cristina. Se la veía animada...